Anoche, el bulevar Insurgentes no fue solo una vialidad más de Tijuana.
Se convirtió en un corredor de luces, música y familias completas saliendo a ver algo que ya no se ve tan seguido: un desfile pensado para convivir.

La caravana navideña recorrió Insurgentes de punta a punta, y desde temprano comenzaron a verse escenas muy tijuanenses: papás cargando a sus hijos en los hombros, celulares grabando, niños señalando los carros alegóricos y vecinos saliendo a la banqueta solo para no perdérselo.

El contingente fue encabezado por el alcalde Ismael Burgueño, quien participó en el primer tráiler del desfile. El recorrido arrancó en la estación del SITT Insurgentes, a la altura de la colonia Azteca, y terminó en el Parque Morelos.

LUCES, PERSONAJES Y VILLANCICOS EN VIVO

Durante el trayecto, los carros alegóricos iluminados marcaron el ritmo del desfile. No faltaron los clásicos de la temporada: Santa Claus, el Grinch y personajes navideños que iban saludando a las familias desde los remolques.

La música también fue protagonista. Grupos interpretaron villancicos en vivo, lo que hizo que muchos se quedaran más tiempo del planeado, simplemente disfrutando el ambiente.

No era un evento para correr: era uno para quedarse a ver.

CIERRE CON VERBENA Y REGALOS EN EL PARQUE MORELOS

Al llegar al Parque Morelos, la caravana dio paso a una verbena navideña, donde se entregaron cenas navideñas y juguetes a niñas y niños. El ambiente fue completamente familiar, con presencia de regidores, la síndica procuradora y funcionarios municipales acompañando la actividad.

En su mensaje, el alcalde explicó que el objetivo principal del evento fue fomentar la convivencia familiar, algo que —en sus palabras— también es una forma de hacer ciudad.

“Aportamos un granito de arena en esta época navideña, agradeciendo a todo el equipo que hizo posible esta caravana y deseando a las familias una feliz Navidad y un próspero Año Nuevo”.

UNA CARAVANA QUE YA PROMETE VOLVER

Burgueño adelantó que la caravana navideña regresará el próximo año, como parte de las actividades que buscan recuperar espacios públicos y generar momentos de encuentro entre las familias tijuanenses.

Anoche, al menos por un rato, Insurgentes dejó de ser tráfico…
y se convirtió en Navidad.